miércoles, 25 de noviembre de 2009
HOLA.,., me encanta tu originalidad...suerte....en todo lo que emprendas...
viernes, 20 de noviembre de 2009
martes, 17 de noviembre de 2009
viernes, 6 de noviembre de 2009
IMPORTANCIA DEL ASESORAMIENTO
IMPORTANCIA DEL ASESORAMIENTO
Gracias a esta comunicación mutua, enriquecedora para ambas partes, la tarea educativa adquiere un sentido más pleno y gana en efectividad.
EL ASESOR PEDAGÓGICO
Entrevistas:
ASESORAS:
Sonia Firpo
Gimena Bolzán
Paola Cabezas
Silvina Rodriguez
María Sosa
Soledad Daglio
A partir de las experiencias compartidas por los asesores pedagógicos que desempeñan su rol en instituciones educativas con distintas realidades, ha modificado la estructura del rol del asesor que había elaborado por medio de bibliografías leídas.
Entre las asesoras hubo variedad de relatos y realidades, desde cumplir con funciones administrativas hasta de asistencia del alumno, pero sí coincidían en el trabajo que desempeñan con el docente, pero se planteaba la duda de que si su tarea es observarlos o no. Unas de ellas planteó que “no observaba a docentes porque no está escrito en ninguna resolución que diga la función del asesor, además esto llevaba a choques entre ellos”.
Entonces, con este planteo, ¿quiere decir que el asesor tiene total libertad para aceptar o rechazar los servicios en cualquier momento?
Lo que sí dejaron claro es que el rol del asesor no está específicamente definido, sino que se va realizando en la marcha, y que son los encargados de ayudar, asesorar como su palabra indica, a toda persona implicada en el proceso educativo con el fin de mejorar la práctica educativa de estos, lo que lleva a una multiplicidad de actividades a realizar y un trabajo permanente y constante. Se va construyendo de a poco y con el paso del tiempo, con su relación con las demandas de la institución, su trabajo con la dirección y los profesores, y al mismo tiempo con sus propias concepciones de lo que sería asesorar.
El asesoramiento es un campo muy abierto que no constituye un único tipo de prácticas de apoyo sino más bien un conjunto heterogéneo que se desarrollan en distintos escenarios y con propósitos, agentes y estrategias diversas, es decir, que su función abarcaría todos los elementos de un proceso de emergencia que afecta algún tipo de práctica. Esto lo puedo sustentar con la caracterización que Dejours y Dessors plantean sobre el trabajo. Ellas son:
» “creación de novedad, de inédito”;
» “actividad desplegada por los hombres y las mujeres para enfrentar lo que no está dado (por la organización teórica del trabajo)”;
» “todo lo que los hombres y las mujeres se ingenian en inventar para encontrar los mejores compromisos entre lo que deben hacer, lo que es posible hacer, y lo que desearían hacer teniendo en cuenta lo que creen que es justo o bueno”.
¿Debería el asesor cumplir con las tareas administrativas?
Si el asesor, además, cumple con funciones administrativas ¿no le quita tiempo para decidir y desarrollar sus otras funciones?
El asesoramiento ¿no tiene muchas cosas extras?
Con respecto a convocar reuniones del personal docente para la evaluación conjunta respecto a la marcha del proceso educativo, la mayoría de las asesoras coincidió en que ésta es una de las tareas más difícil, porque es casi imposible juntar a todos los docentes en un mismo día y a una misma hora, por lo tanto se hace ardua la evaluación y el diálogo entre ellos.
Pero si no pueden tener una reunión entre ellos ¿cómo llegará a saber el asesor las problemáticas de los docentes? Y ¿cómo los docentes podrán saber cómo resolver sus problemáticas si no hay diálogo con el asesor?
Todo esto lleva a que la tarea del asesor se vuelva cada vez más dificultosa porque no tiene el acompañamiento que debe tener en su trabajo, ni por parte de sus colegas ni por parte, como plantearon algunas asesoras, del director, porque si éste no avala tu decisión no se puede desplegar lo planeado. Todo lo que uno construye y decide queda en la nada.
Debe darse un ámbito de colaboración, de responsabilidad compartida, de interacción abierta y permanente, de comunicación con los demás profesionales.
Viéndolo desde otra perspectiva, tomo el rol del asesor como un campo poco delimitado y definido socialmente, ni siquiera aún al interior de las mismas instituciones educativas. Esto hace que, a su vez, sea rechazado por algunos profesionales involucrados en la institución, como planteó una de las asesoras que estuvo en la charla con asesores. Es decir, de sentirse invadidos, mirados, evaluados, y si bien manifestaban que a algunos les complacía la presencia porque sentían que los guiaban en su accionar, otros declaraban desagrado ante el asesor.
Por lo tanto creo que es indispensable el conocimiento de la función que desempeña el asesor en la institución.
Que se conozca la labor del asesor que se dirige a una relación de colaboración en el trabajo, para ofrecer herramientas y procesos que capaciten a los propios docentes a mejorar lo que hacen. Ya que supone crear una relación de igualdad entre asesor y asesorados.
Finalizando con este trabajo y tomando los diferentes planteamientos manifestados por las asesoras, podría decir que el asesor es un elemento mediador. Media entre el conocimiento pedagógico disponible y las prácticas y conocimientos profesionales de los profesores. Su función principal, entonces, consiste en servir de “enlace” entre el conocimiento acumulado sobre determinados ámbitos, y los profesionales que trabajan en él.
También, lo podría definir como un elemento colaborador; colaborador en la identificación y solución de problemas y que no sólo se limita a hacer un diagnóstico externo, sino a contribuir, a identificar los problemas, a ver y también asistir las posibilidades de desarrollo.
2009